thumb do blog Renato Cardoso
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¿QUÉ SE NECESITA PARA TENER PAZ INTERIOR?

Recordaba tres momentos principales en mi vida, antes de conocer a Dios, en los que me faltó la paz. Reflexioné en el hecho de que un niño puede vivir sin paz, como en el caso de las experiencias que relataré aquí.

Era un niño, un preadolescente, cuando mis padres se peleaban. Yo notaba ese clima pesado en casa y eso robaba mi paz. Usted sabe que un niño se da cuenta cuando los padres están bien o no.

Otra cosa que me quitaba la paz era cuando veía que mis padres hablaban sobre los problemas económicos. Muchas veces, me mandaban a comprar pan y mi madre me decía que le pidiera al dueño de la panadería para pagarle la semana siguiente. Eso me avergonzaba. En las conversaciones entre ellos, los escuchaba contar sobre los problemas económicos que mi padre enfrentaba.

Y, por último, cuando tenía 13 años, la peor bomba de todas cayó sobre nuestras cabezas: cuando descubrimos que mi padre había traicionado a mi madre.

Cuando pensamos en lo que nos quita la paz, reflexionamos sobre esa tan buscada paz. La pregunta es: ¿qué se necesita para tener paz? ¿Será el dinero? ¿Será que lo que falta es amor? ¿Éxito? El dinero ayuda a pagar las cuentas; estar al lado de quien amamos también es muy bueno; así como tener una carrera que lo satisface, pero nada de eso garantiza la paz.

La paz no es algo o un lugar al cual muchas personas viajan. La paz es una persona. Dice el Texto en Efesios 2:14 “Porque Él es nuestra paz…”. Si la paz es una persona, tengo que buscar a esa persona y tener un encuentro con esa persona, para que pueda recibir la paz, una experiencia espiritual y la verdadera paz que es la persona del Señor Jesús. Él se presenta como Príncipe de Paz y solo donde Él reina se puede tener la verdadera paz.

Si usted busca la paz en el amor de las personas, en el éxito, en el dinero, su búsqueda será frustrada, porque buscará en las cosas y en los lugares equivocados. La paz es una persona. Esta paz es el Señor Jesús, el Príncipe de Paz. Si usted quiere tener un encuentro con la paz, debe buscar a la persona que le dará esa paz. Cuando Él esté en su vida, entenderá que la paz no es la ausencia de guerra, sino la Presencia de Dios en su vida.