thumb do blog Renato Cardoso
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¿ESPÍRITU SANTO? HABRÁ SEÑALES

¿Sabe qué es el Espíritu Santo y cuáles son las señales cuando Él habita en una persona? Descubra lo que revelan las señales de su vida: ¿una persona llena del Espíritu Santo o alguien que Lo necesita urgentemente?

El que tiene al Espíritu Santo, por lo general, no lo dice, pero hay señales; el que no Lo tiene no mostrará señales, pero, por lo general, dirá que sí Lo tiene.

¿Quién es el Espíritu Santo? Es una promesa de Dios en Su Palabra. Dios es tres en uno: Padre, Hijo y Espíritu Santo. ¿Cómo es posible que sea tres al mismo tiempo? Bien, es como nosotros. Yo soy varios en uno: marido, padre e hijo. Y esto se nos revelará plenamente cuando Dios lo desee, pero lo que ahora usted debe comprender es que el Espíritu Santo es la Persona de Dios prometida para habitar dentro del cristiano. El que no tiene al Espíritu Santo no tiene a Dios. Y, de la misma manera que usted es responsable solo de lo suyo, Dios solo es responsable por los que son de Él.

La persona no debe hacer nada para merecer al Espíritu Santo, sin embargo, debe estar en condiciones de recibirlo, como, por ejemplo: creer. Pero no es solo «creer» en el sentido de «creer que algo existe», sino de una entrega de vida. En la Iglesia Primitiva, las personas sabían que creer significaba exponerse a la pérdida de bienes y familiares, de convertirse en enemigas del Estado y, tal vez, ser torturadas y asesinadas.
Cuando la creencia es verdadera hasta este punto, la persona es bendecida con el Espíritu Santo, Él pasa a vivir en su interior. Y, cuando eso sucede, hay señales.

El que tiene al Espíritu Santo puede tener problemas, porque vive en un mundo problemático, pero la persona no es «el» problema. No es una persona difícil de convivir, complicada o resentida. El Espíritu Santo le enseña que no debe guardar rencor y la capacita para vencerlo. Hay personas con las que debe tener cuidado con lo que dice, porque malinterpretan todo lo que usted dice, tienen asuntos no resueltos en su interior, son personas pesadas y difíciles de tratar. La persona que no tiene al Espíritu Santo es problemática, genera resistencia a todo. Hay cosas que debemos cuestionar, en lo que se refiere a la sensatez, pero hay cosas que son obvias para una buena convivencia. Y las personas que no Lo tienen crean problemas donde no los hay.

El que tiene al Espíritu Santo tiene claridad mental, es disciplinado, tiene el carácter de Dios, no vive en mentira ni comete injusticias conscientemente y a propósito. El que tiene al Espíritu Santo tiene la conciencia de lo ajeno, de lo que es del otro. Si sufre de alguna injusticia, no desiste a causa de eso. Cuando sufrimos injusticia por la fe que profesamos somos bendecidos, nuestro galardón se incrementa. El que no tiene al Espíritu Santo no soporta el desierto, abandona a Dios y dice: «Él no me escuchó. Me voy».

Por lo tanto, el que no muestra señales, pero dice tener al Espíritu Santo, se engaña a sí mismo. Es la peor situación en la que alguien puede estar: no tener al Espíritu Santo, pero cree que sí Lo tiene.

Reflexione al respecto mirando el video.

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Colaborador

Obispo Renato Cardoso