thumb do blog Renato Cardoso
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USE SU SEXTO SENTIDO

Usted tiene un sexto sentido, ¿lo sabía? ¡Dios se lo concedió! Este sexto sentido lo sustentará en los momentos más difíciles, por eso, sáquelo del cajón y póngalo en práctica

Si de los cinco sentidos que Dios le dio al ser humano (vista, olfato, oído, gusto, tacto) usara solo uno, ¿cómo sería su vida? Solo tiene que observar a una persona que vive así; seguramente, tendría que esforzarse mucho más con los demás sentidos para suplir el que le falta.

Ahora bien, piense por medio de la Palabra de Dios. En este mundo material, Dios también nos dio un sentido extra, llamado fe, que no depende de los demás. Esta fe no necesita ver para creer, al contrario, trae a la existencia lo que no existe.

Nosotros vemos un ejemplo de esto en la Biblia: «Pero mientras navegaban, Él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago; y se anegaban y peligraban. Y vinieron a Él y Le despertaron, diciendo: ¡Maestro, Maestro, que perecemos! Despertando Él, reprendió al viento y a las olas; y cesaron, y se hizo bonanza. Y les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Y atemorizados, se maravillaban, y se decían unos a otros: ¿Quién es este, que aun a los vientos y a las aguas manda, y Le obedecen?», Lucas 8:23-25.

El Señor Jesús les estaba preguntando dónde estaba su sexto sentido. Era algo que Dios les había dado. Lo mismo podemos observar en un acontecimiento que involucró a Moisés y el cayado delante del mar (Éxodo 14:15-16). El Altísimo nos dio la fe para esos momentos en los que todo sale mal, en los que las fuerzas y los recursos no resuelven nada.

Preste atención, usted que está en un barco en medio de la tempestad. En lugar de desesperarse, ¿por qué no usa la fe?

Jesús nos enseñó, con este ejemplo, que la fe está por encima de la naturaleza, del mundo material; por eso todo le es posible al que cree.

La fe nos sostiene, nos mantiene; es el sentido que usamos en los momentos difíciles. De esta manera, ignoramos lo que vemos, lo que sentimos, y nos apegamos a la Palabra.

Jesús le pregunta: «¿Dónde está tu fe?».

Saque su fe del cajón, quítele el polvo y úsela. Usted quedará maravillado por los resultados que le proporcionará. El nombre de esto es milagro.

¿Ponemos la fe en práctica?

Vea el mensaje completo en el siguiente video.

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Colaborador

Obispo Renato Cardoso