¿Ya se imaginó que el propio Dios habite dentro de usted?
Ciertamente es algo muy bueno, pero no a todo el mundo parece importarle. Y lo peor es que la mayoría de las personas no saben que esto es posible.

Sin embargo, según las Escrituras, esto no solo es posible, sino que es exactamente lo que Él quiere. Dios quiere habitar en nosotros. La Palabra de Dios a nuestro cuerpo terrenal lo denomina Templo, morada del Espíritu Santo.

Así como alguien cuando ama a alguien y desea casarse, vivir con esa persona, y, con el paso del tiempo, se parecen más, el que tiene a Dios en su interior pasa a tener Su imagen y semejanza, es decir, tiene el carácter de Dios.

Pero ¿cómo hacer para que Dios habite en nuestro interior? ¡Es más simple de lo que parece!

Vea este video completo y sepa cómo alcanzar el mayor tesoro que usted puede tener.