Por más absurda que pueda parecer la situación mostrada en el video de arriba, es más común de lo que parece. Y no solo con respecto a la raza. El prejuicio está en todos lados, desde lo religioso hasta lo social, desde lo cultural hasta lo económico. Es como dijo Robert Anthony: «La mayoría de las personas no piensa. Simplemente reorganizan sus prejuicios.»

Todos somos prejuiciosos. Incluso la profesora de letras que juzgó al abogado por la ropa que vestía.

Una vez fui tratado con enorme desdén por un líder evangélico, que me había encontrado por primera vez, solo porque había bebido del veneno mediático sobre la Universal. Él ya había formado su concepto sobre mi persona antes de conocerme. Lo que sentí por él, por la forma que me trató, fue algo que no consigo resumir en una palabra. Una mezcla de asco con lástima y pizcas de enojo. Pero sé que también ya fui pre juicioso. Es un mal que solo es vencido con el desarrollo de la inteligencia.

Inteligencia y prejuicio no combinan. En donde la inteligencia es débil, el prejuicio es fuerte. No me refiero a la inteligencia específica, sino a la general. Alguien puede ser muy inteligente para la ingeniería, pero completamente pre juicioso (y estúpido) a respecto de las personas de otro país, por ejemplo.

Necesitamos abrir nuestra mente y no prejuzgar a las personas. Oír el otro lado de la historia.

El prejuicio es uno de los mayores obstáculos para el progreso de una persona y de una sociedad.

¿Usted ya ha sido víctima del prejuicio? ¿Ya ha sido pre juicioso y algo le hizo cambiar? Cuente su historia abajo.

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