El que quiere robar su alma quiere que usted piense en todo, menos en ella. Quiero hablarle sobre su alma, sobre una parte de usted que es eterna. Usted está formado por cuerpo, alma y espíritu. Todos sabemos que ese cuerpo está envejeciendo y va camino a la muerte. El espíritu es la parte que une cuerpo y alma, es el aliento de vida que Dios sopló en la nariz del hombre cuando lo creó. De esta manera, el hombre se volvió alma viviente. Cuando él muera, ese soplo de vida volverá a Dios. Pero el alma es eterna, no muere, permanece, aun sin cuerpo.

¿De qué manera trabaja el mal para robarles el alma a las personas? Haciendo que piensen en todo, menos en la Salvación. Vivimos en una sociedad en la que no tenemos un segundo para descansar la mente y simplemente no pensar en nada. Toda la sociedad está organizada de tal manera que su mente está comprometida desde el momento en el que despierta hasta el momento de dormir y, normalmente, la persona no logra dormir, porque su mente está acelerada. La verdad es que la mente humana no está preparada para el ritmo de informaciones ni para la cantidad de informaciones que ha absorbido en los últimos años a través de diferentes medios. El celular es prácticamente una extensión del cuerpo.

Y todo es intencional para que las personas no piensen en el alma que tienen, lo que es de mayor valor. Cuando entiende esto, entiende el motivo de su ansiedad, de su insomnio. Tal vez, antiguamente, le gustaba leer, pero ahora no tiene más paciencia para hacerlo. Prefiere ver una serie en la televisión y chequear la red social varias veces al día. Es decir, es una falsa sensación de que su vida está bajo su control, a usted lo controlan. Puede notar que la estrategia es enviciar a las personas. Y el vicio es el mejor ejemplo de suspensión del razonamiento. La persona no piensa, solo busca sentir. Esta es la sociedad en la que vivimos, y todo está empeorando.

¿Acaso el aspecto de su rostro testifica contra usted, un semblante caído, una mirada opaca, sin brillo? ¿Solo se enfoca en algo fútil, materialista, momentáneo, y así no ha pensado en cosas importantes como su alma? Usted puede tomar las riendas de su vida y decir: «No seré un robot». Solo usted puede tomar esta decisión. Reflexione sobre el video.