thumb do blog Renato Cardoso
thumb do blog Renato Cardoso

Oración por dirección

Dios mío, es tan bueno poder hablar con el Señor, a cualquier hora, en cualquier lugar, aunque no lo haga con la frecuencia que debería. No hay excusas. Aun así, pienso en el Señor todo el tiempo. Estoy siempre preguntando: “¿Qué debo hacer acerca de esto, Señor?» y «¿Cómo reacciono ante este problema?» y «¿Qué quiere que yo haga ahora, Señor?» Quiero mucho oír Tu voz. Tu consejo es tan valioso para mí.

Pero el ruido a mi alrededor es tan fuerte. Tantas cosas sucediendo, tantas opiniones, tantas cosas por  hacer… Es cómico, porque esto sólo debería darme más razones para buscarTe, para escuchar tu voz claramente en medio de tantas distracciones. Tengo que recordar eso, y nunca permitir que mis muchos quehaceres diarios y la abundancia de «consejos» me hagan olvidar Tu orientación.

Yo no quiero dejarme llevar por mi propia sabiduría, Señor. Eso sería peligroso. Mi sabiduría, en realidad, es burricie. Necesito tener Tu perspectiva, ver las cosas de la misma manera que el Señor las ve; necesito estar seguro de que estoy en el camino correcto. Por favor, ¡ayúdame!

Necesito saber qué hacer. Por favor, Señor, date prisa. No tengo mucho tiempo.

Muéstrame qué hacer, y dame coraje para hacerlo.

En nombre de Jesús. Gracias. Amén.

Lea este mensaje en inglés…