Recuerdo claramente las competencias en la escuela: carrera de embolsado, el huevo en la cuchara y, principalmente, aquella prueba de caminar con un vaso lleno de agua sin derramar. Era difícil mantener el equilibrio. Pero ese recuerdo nos hace entender que, en la vida, podemos pasar por algo parecido. Por eso, esta experiencia de «la prueba del vaso lleno» nos remite a situaciones en las que es necesario controlar la ira y manejar las emociones antes de que se desborden y causen perjuicios.

Así como es casi imposible dar un paso con un vaso lleno hasta el borde sin derramar, también es un desafío contener la ira cuando se ponen a prueba nuestros límites. De esa forma, se percibe que, si no actúas, comprometerás tus relaciones, tu carrera e incluso tu vida espiritual.

Qué aprender con la Palabra de Dios

La Biblia no dice que el justo nunca se enoja. Ella enseña que es sabio «tardar en airarse» (Proverbios 14:29). Dios también se enoja, pero Su ira es justa y controlada. Es necesario observar que cuando uno está enojado, el vaso se llena y se desborda, provocando daños. Además, Salomón afirmó que quien se domina a sí mismo es más fuerte que quien conquista una ciudad.

Por lo tanto, el problema no está en sentir ira, sino en permitir que la ira se acumule y explote.

Cómo vaciar el vaso antes de que se desborde

Es necesario reconocer las señales de que el «vaso» se está llenando. Entonces, detente por un momento, respira, pospone una respuesta o aléjate de la situación. Además, la oración se ha convertido en un recurso poderoso: derrama ante de Dios la ira, la ansiedad y el miedo, y sal de ese momento con el corazón más liviano.

Después, con el «vaso» más vacío, usa la razón para decidir cómo resolver el problema. Esto no significa ignorar la situación, sino enfrentarla con equilibrio, evitando dar «lugar al diablo», como advierte la Biblia.

Preserva tus relaciones y a ti mismo

Cuando se practica el «vaciar el vaso» regularmente, no solo se preservan tus relaciones, sino también la salud mental, emocional y espiritual. De esa manera, mantendrás tu fe y actuarás con sabiduría, haciéndote más fuerte frente a los desafíos.

En este video, descubre cómo pasar la prueba del vaso lleno: controlar tu ira, mantener el equilibrio y no perder todo por una explosión que podría haberse evitado.

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