Durante los doce primeros años de nuestro matrimonio, Cristiane y yo dejamos que un problema entrara en medio de nosotros. Este llegó como todos los problemas de parejas: sin ser invitado y sin aviso. Y se quedó. Se alojó en un rinconcito y cada dos por tres levantaba su cabeza fea. Las peleas se repetían. Era un ciclo.

Nosotros cometimos un error clásico de la mayoría de las parejas: dejamos que el problema se instale entre nosotros y nos divida. Cuando nos casamos, estábamos unidos. Ahora, éramos uno contra uno.

Un día, finalmente, la ficha cayó. Entendí que Cristiane no era mi enemiga y viceversa. Volvimos a unirnos y comenzamos a luchar contra el verdadero enemigo: el problema. Lo que no logramos en doce años, fue finalmente resuelto en menos de tres meses.

Una ilustración de lo que les sucede mucho a las parejas, que puede incluso terminar en divorcio:

 

Celos, traición, mentira, deudas, falta de atención, enfermedades, comportamiento inapropiado en Internet, temperamento fuerte, parientes, influencia del ex, hijos de relaciones anteriores, vicios – la lista es muy larga… Cualquier cosa puede entrar en medio de la pareja y separarlos, si ellos lo permiten. Uno se pone en contra del otro, el enojo entra, la decepción se apodera, y la guerra está armada. Solo que una guerra contra el enemigo incorrecto. El enemigo no es su esposa o su marido, sino el problema.

El cambio que hicimos, que cualquier pareja puede hacer, fue poner al problema en su lugar, así:

Cuando la pareja entiende esto, que no son enemigos uno del otro, sino compañeros, se unen en contra del problema. Fue eso lo que hicimos. Yo pensaba que el problema era Cristiane, y ella, que yo lo era. Cuando separamos las cosas, me enfoqué en el hecho de que la amaba, pero odiaba a ese problema. Entonces me uní a ella y ella a mí. Juntos, unimos fuerzas y atacamos el problema sin compasión. Una pareja en búsqueda de la solución. Fue más fácil. Entonces realmente se puede decir «dos contra uno es cobardía». En este caso, no es cobardía, es inteligencia.

Inteligencia que ni siquiera el diablo deja pasar. A esto usted le tiene que prestar atención…

Jesús una vez fue acusado de expulsar demonios por el poder del jefe de los demonios.
Recurrió a la inteligencia.

Toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá. Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, permanecerá su reino? Mateo 12:25-26

Es decir, unir fuerzas es algo tan poderoso que ni siquiera Satanás renuncia a eso. Él es la esencia del odio, de la contienda, del desamor – pero cuando actúa para causar destrucción, ni siquiera él deja de lado la fuerza de la unidad.

Ahora le pregunto: si Satanás es capaz de unirse a Satanás, ¿por qué diablos usted y su cónyuge no se unen contra su problema?

La pareja que se destruye no necesita enemigos. No lo necesita ni siquiera a Satanás.

No sea burro. Únase a quien usted ama. No pierda de vista a su verdadero enemigo.

El día 16 de octubre, Cristiane y yo vamos a enseñarles a cómo hacer lo que hicimos y a destruir el problema que los ha destruido a ustedes. Será el Día del 2contra1 – un evento especial para parejas y solteros en la Terapia del Amor.

Si ustedes quieren unirse en contra del problema que los ha separado, marque esta fecha en su calendario. Esté allá.

2contra1 – 16 de octubre
ENTRADA GRATUITA
Elija entre las dos sesiones:
10 y 20 h. (las puertas se cierran 5 minutos antes)
Templo de Salomón: Av. Celso Garcia 605 – Brás, São Paulo
Estacionamiento en el lugar – ver mapa…

¿No puede participar en São Paulo?
Participe de la Terapia del Amor en una ciudad más cercana en todo Brasil.
Use el buscador de direcciones en la página www.terapiadoamor.tv