thumb do blog Renato Cardoso
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USTED NO ELIJE LOS SENTIMIENTOS, PERO PUEDE DECIDIR HACER LO CORRECTO

Es muy importante que usted venza en todas las áreas de la vida, que entienda que fue creado para buscar primero su confort y su supervivencia. Dentro de nosotros hay un «programa» que busca sobrevivir. Por ejemplo: ¿Por qué la mayoría de las personas tienen miedo a las alturas? Porque su cuerpo le dice: «Sal de aquí, ¡estás en peligro!». Todo en nosotros trabaja para nuestra autopreservación. Este es un tipo de miedo bueno, porque nos ayuda. Ahora, el mismo miedo que me ayuda a evitar el peligro es lo que me impide hacer cosas desafiantes, de salir de mi zona de confort.

Bien, ¿qué podemos hacer con esta información? El apóstol Pablo dijo: «Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago», Romanos 7:19. Es decir, se refería a esa lucha interior. Un lado de él quería hacer el bien y el otro lado quería hacer el mal. Es como si estuviera en guerra contra él mismo. Esa guerra diaria nos sucede todos los días y debemos entender que tenemos sentimientos de miedo, pavor, duda, ansiedad, incapacidad, desmotivación. Porque queremos estar en una situación «cómoda», por así decir. Sin embargo, el ser humano, al ser adaptable, se acostumbra incluso al dolor y termina aceptando el problema como si fuera lo correcto.

Pero hay algo muy importante que debe entender: si espera sentir ganas, ánimo y motivación para hacer algo bueno, probablemente, nunca comenzará. A causa de esa naturaleza de supervivencia, nuestros sentimientos, normalmente, nos llevan a permanecer donde estamos. Nunca se sentirá listo para comenzar un negocio, de ir a la facultad o de tener una conversación difícil en la relación. Usted tiene que entender que nadie lo ayudará a salir de esa situación en la que está, debe salir por sí mismo.

Aunque no puede elegir sus sentimientos, puede decidir qué hacer al respecto. Puede no sentir ganas de levantarse cuando el despertador suena, pero puede decidir: «Me levantaré». Cuando usted une esta decisión al Espíritu de Dios, sabe que no estará solo. Sea señor de sus sentimientos, no esclavo, porque los sentimientos son pésimos señores.

Vea el video y reflexione sobre el tema.