Alguien me hizo una pregunta muy pertinente: ¿Cuál es la mejor manera de empezar a leer la Biblia, desde el comienzo o aleatoriamente? La Biblia realmente es un libro extenso. Incluso, en algunas partes hay palabras que se pueden entender y otras no. Entonces, al comienzo, nos perdemos. Sin embargo, es importante que tenga el hábito de leer la Palabra de Dios. Inclúyalo en sus hábitos matutinos.

Si usted ya está familiarizado con la Biblia, le será más fácil poder abrirla de manera aleatoria y extraer de esa parte algo para alimentar su espíritu. Pero esto solo sucede cuando usted ya entiende. Al que recién empieza, le recomendaré libros por los que puede empezar:

1.° Génesis: es el libro que trata sobre el comienzo del mundo. Es importante que usted tenga esta base, porque allí conocerá la creación del mundo, cómo las cosas se desmoronaron a partir del jardín del Edén. Verá que Dios intentó darle un recomienzo a la humanidad y cómo llegamos hasta aquí. También verá que la humanidad no cambia, que el hombre de hoy es semejante al del comienzo. La naturaleza humana no cambió.

2.° Evangelio de Juan: este libro es como el «Génesis» del Nuevo Testamento. Son cuatro evangelios, pero usted primero leerá el libro de Juan. A través de este entenderá la misión del Señor Jesús, Quién era Él en la creación, cuando todo inició. También entenderá Su llegada a este mundo en carne y hueso para una misión, y cómo vivió Sus 33 años, hasta terminar Su misión en la cruz. Finalmente, nos dejó una misión a todos nosotros. Este libro es más fácil de entender, porque se escribió para un público universal, tanto para los judíos como para los gentiles.

3.° Evangelio de Marcos: este es el evangelio más breve. Es un rápido panorama de lo que sucedió en la vida del Señor Jesús.

4.° Evangelio de Lucas: este es el evangelio más completo, porque Lucas era médico, se interesaba por la lógica de las cosas, la secuencia y el orden.

5.° Evangelio de Mateo.

Si usted lee en este orden, entenderá mucho mejor la Biblia.

Algunos consejos para no tropezar en el camino:

• No intente entender todo de una sola vez: la Palabra de Dios funciona en la medida que la necesitamos. Dios nunca dice todo lo que debemos saber, sino lo que necesitamos saber. Tampoco nos dice todo lo que nos gustaría, sino lo que necesitamos en ese momento. Esté atento a lo que Dios le diga.

• Algunas partes no serán tan claras (no se detenga en ellas, siga adelante, enfóquese en lo que entiende). El secreto de la verdadera fe no es el conocimiento bíblico en sí, sino la práctica de lo que está escrito. Los que estudian la Biblia no necesariamente serán salvos. El Señor Jesús tuvo Sus peores conflictos con los doctores de la Ley (los que estudiaban las Escrituras, pero no las practicaban). Lo más importante en la lectura bíblica es «hacer». Lo poco que entienda, hágalo. De esta manera, usted se volverá la propia Palabra.

Comience a hacer esto y luego cuénteme cómo le ha ido. Vea el mensaje completo en el siguiente video.