Ya perdí la cuenta de cuántas veces me sentí mal por no saber detectar cómo lidia Cristiane con su estrés. ¿Quién no se estresa hoy en día? Por más calmado, sereno y tranquilo que usted pueda ser, va a llegar un día en el que todo lo que podía salir mal va a salir así — al mismo tiempo. Problemas inesperados, personas difíciles, reclamos de otros y de usted mismo, frustraciones, expectativas no cumplidas… un cóctel para dejar a cualquiera estresado.

Cuando el estrés viene, tenemos que hacer alguna cosa con él. Y cada uno lidia con su estrés a su manera. Yo, por ejemplo, entro en modo silencioso. Hablo poco, pienso mucho, no tengo ganas de reírme de nada, ni siquiera el perrito recibe cariño. Por otra parte, Cristiane es lo opuesto. El estrés de ella se derrama para afuera y en todas las direcciones. Piensa mucho y habla aún más (resultado: a veces habla sin pensar). No esconde las emociones. Y toma al perrito en su regazo, lo abraza, lo acaricia, lo besa y le habla como si fuera el único que la entendiera en aquel momento. (En realidad, él debe quedar tan perplejo como los humanos viendo la escena.)

La manera con la que Cristiane lidia con su estrés no es muy diferente de otras mujeres, y tampoco la mía de otros hombres.

La cuestión es que es muy, muy fácil que el marido o la esposa malinterpreten el comportamiento que el compañero manifiesta cuando está estresado.

Lo que hago cuando estoy bajo estrés puede ser fácilmente visto por Cristiane como si yo estuviera enojado con ella, como si no quisiera incluirla en mi mundo, y fuera un pesado de marca mayor. Y ya salí herido muchas veces de sus crisis pensando que ella no me respetaba, no tenía dominio propio, y trataba al perrito mejor que a mí.

Pero hoy entendemos mejor lo que está sucediendo. Estamos apenas estresados. No es culpa de nadie. Entonces ella me deja en mi rincón, y yo busco oírla y recibir el torrente de emociones sin juzgarla ni llevarlo para el lado personal. Nuestro consuelo es saber que en seguida aquello va a pasar. Y pasa.

Por lo tanto, una de las mejores cosas que usted puede hacer en su relación es conocer cuándo su compañero está estresado y cómo él o ella lidia con eso. Una vez que sabe eso, decida no llevar nada hacia el lado personal y no hacer cosas que empeoren la situación.

Si su pareja llega a comportamientos extremos, realmente destructivos, entonces en otro momento, lejos de aquel estrés, conversen sobre la situación, buscando maneras alternativas y más saludables para lidiar con el problema.

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