Si usted sufre por no tener una familia, porque lo abandonaron, o incluso tiene una buena familia, sin embargo, no se siente amparado por ella, ¡le tengo una buena noticia

¡El Señor Jesús quiere ser su familia! ¡Él quiere ser su Hermano! El Hermano mayor, el que nos protege, nos guarda, nos comprende e intercede delante del Padre.

Así como Él puede llamarlo Dios al Padre, Él también dijo: ¡es Dios el que quiere ser su Padre!

Si bien es cierto que usted no tuvo la oportunidad de elegir a su familia terrena, pero puede formar parte de la familia de Dios. ¡Esta es su decisión!

Vea este fragmento del mensaje del Domingo de Pascua, y aprenda a ser más que un religioso que frecuenta la iglesia los días conmemorativos, ¡un miembro de la familia de Dios!