Estoy pasando por una fase así… El sentimiento, dicho como pasión, viene estorbándome. Soy de la Universal desde que nací, tengo 22 años. A los 16 me aparté y entonces comenzó mi desgracia.: bebidas, prostitución, tuve un hijo, fui humillada, agredida… Hasta los 21 viví de apariencia. Cuando comencé a estar de novia con un muchacho, aparentemente temeroso de Dios, mi madre hizo un propósito para que yo volviera a la iglesia.

Mire, ¡es una guerra! Él me aparta de Dios en todos los sentidos. Anulé mi vida a causa de él y ya tomé la decisión de bautizarme, pero permití que él lo impidiera. Tengo discernimiento y sé que no tengo la Salvación. El diablo, de algún modo, quiere destruirme en la vida sentimental. Mi novio, inclusive, es policía y ya me dijo que una vez le vino una imagen a su mente de que me mataba. Me está faltando coraje para terminar con esta relación, acerca de la cual tengo certeza de que fue el propio diablo que me la dio, pues es una cosa que me hace llorar más que sonreír.

Hoy me convertí en una persona infeliz, triste y cerrada. Y pensar que un año atrás tenía todo, era feliz, alegre y comunicativa. Ya llegué a pensar en el suicidio… Realmente la guerra está dentro de nosotros. Me agarré a Dios, pero tengo que cambiar mucho todavía. Dios me ha sustentado, porque sabe que tengo muchas ganas de conocerlo de verdad, conocer Su amor y tener toda la paz que sé que Él me puede dar. Yo creo y no voy a flaquear.

Thais Soares