Obispo, estuve durante 5 días en Israel y vi tres cosas que me llamaron la atención y que me gustaría compartir con usted.

Esas tres cosas están relacionadas a la VERACIDAD de la Palabra de Dios. ¡Es increíble cómo Esta es verdadera y se cumple, le duela a quien le duela!

1°) Cuando llegué a las proximidades de la Fuente de Gedeón, avisté el monte Gilboa, del que la Palabra de Dios dice lo siguiente:

“Montes de Gilboa, ni rocío ni lluvia caiga sobre vosotros, ni seáis tierras de ofrendas; porque allí fue desechado el escudo de los valientes, el escudo de Saúl, como si no hubiera sido ungido con aceite.” 2 Samuel 1:21

La foto del monte Gilboa habla por sí sola: está totalmente seco, mientras que los otros montes al fondo tienen vegetación. Para que usted tenga una idea, hasta el departamento de reforestación del Estado de Israel ya intentó reforestar esa área pero los intentos fueron infructíferos.

Vea la otra foto que muestra las plantaciones alrededor del monte, pero a él mismo totalmente seco.

2°) La segunda, usted habló recientemente durante el Ayuno de Daniel. Fue sobre las ciudades de Capernaum, Corazín y Betsaida, escritas en Mateo 11:20-24

Esas ciudades NO fueron destruidas por obra de hombres, sino por terremotos (obra de la naturaleza) y hasta hoy permanecen solamente sus ruinas, resultantes de la maldición de la incredulidad de su pueblo, que permanece hasta hoy.

Vea la foto de las ruinas de Capernaum.

3°) La tercera está relacionada al mar Muerto.

El mar Muerto se encoge aproximadamente un metro por año, por lo que sus márgenes están quedando cada vez más grandes, y algunos llegan a decir que se está secando; sin embargo, vea lo que dice la Biblia:

“Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán al Arabá, y entrarán en el mar Muerto; y entradas en el mar, recibirán sanidad las aguas. Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este río.” Ezequiel 47:8-9

Vea la foto. Habla por sí sola.

Al lado del mar Muerto están naciendo varios cráteres de agua dulce y la vegetación está creciendo en un área totalmente inhóspita. Es apenas el inicio del cumplimiento de la Palabra de Dios.

Si el pueblo tuviera acceso a este tipo de conocimiento (discernimiento) espiritual, no estarían padeciendo, conforme podemos comprobar en Oseas 4:6, que dice: “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.”

[nggallery id=43 template=galleryview images=0]