thumb do blog Blog Obispo Macedo
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¡Que se haga justicia!

Así como el crecimiento biológico no depende de los ojos humanos, tampoco sirve de nada que los padres se queden mirando para intentar ayudar a los hijos. Lo que ellos necesitan es cumplir con sus obligaciones, alimentarlos adecuadamente, preservarlos de los peligros para su salud, etc.

Así también sucede con el crecimiento que la persona anhela alcanzar en su vida personal. El Señor Jesús dijo: “Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.” Mateo 6:1

¿Cuántos están desesperados, pues han visto pasar el tiempo, ya cuentan con algunos años en la iglesia, y sin embargo sus vidas continúan siendo pequeñas? No logran entender el motivo por el cual algunos que han llegado incluso mucho después que ellos ya hayan manifestado en sus vidas la grandeza de Dios.

Leyendo lo que el Señor Jesús dijo, no es muy difícil entender lo que sucede. ¿Cuántos han dedicado lo máximo de sí cuando hay alguien cerca, cuando están haciendo algo para alguien importante o cuando vislumbran que tendrán un reconocimiento por su trabajo?

Son siempre muy generosos, atentos, serviciales con los que, de alguna forma, pueden beneficiarlos. Ellos pueden llegar incluso a una posición destacada, pero después de algún tiempo sucede algo que hace que todos puedan ver su tamaño real.

Por otra parte el que realmente ejerce su justicia delante de Dios no se preocupa por quién está del otro lado: trabaja cuando está solo como si estuviera en medio de la multitud, hace su trabajo siempre como si fuera lo más importante del mundo, sirve al pequeño como si fuese el más grande y su carácter no cambia de acuerdo con las circunstancias. Es lo que es y listo.

Los ojos del Señor están en todas partes. Si la persona es fiel, no tiene por qué preocuparse. Aunque todos estén en contra, esos todos no pasan, a los ojos del Señor, de ser solo una gota que cae en el balde. La solución para lo que parece demorado es la Fe en la Palabra de Dios.

No se enoje ni se moleste a causa de los que practican el mal y prosperan, usted no sabe cuál va a ser el fin de ellos. No se desanime: su galardón está llegando.