Observando uno de los montes aquí en África, vi una espesa nube blanca rodeándolo.

Me llamó la atención que en todo el cielo no hubiese otra nube.

Apenas sobre aquel monte.

Me maravillé y enseguida lo registré.

Me acordé que Dios condujo a Abraham para afuera de la tienda para ver y contar las estrellas, si pudiera.

Lo hizo en respuesta a su disconformidad porque aun no tenía hijos.

Cuando él contempló el cielo estrellado, su visión de la Grandeza de Dios cambió.

Espero que estas fotos también abran su visión como la de Abraham y cambie su visión de la Grandeza de Dios.

Busque la Biblia y encontré el texto:

«Aconteció que al tercer día, cuando vino la mañana, vinieron truenos y relámpagos, y espesa nube sobre el monte, y sonido de bocina muy fuerte; y se estremeció todo el pueblo que estaba en el campamento.» Éxodo 19:16

Este domingo será el tercer día de junio.

El día de decisión, día del desafío, en fin, el día D en la vida de los que creen.

Estoy seguro de que la Nube del Espíritu descenderá y honrará con Sus grandezas a aquellos que Lo han honrado.

Es lo que el Señor dijo: «… Yo honraré a los que Me honran, y los que Me desprecian serán tenidos en poco« 1 Samuel 2:30

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