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Hijos Sobrenaturales

La capacidad de procrearse ha liberado a la criatura humana para llenar la Tierra de forma indisciplinada y sin un mínimo de temor a Dios.
Y todavía dicen que todos son hijos de Dios…

El hecho es que nadie viene al mundo por la voluntad de Dios.

Como dice el texto sagrado, muchos son generados por descuido –nacerán de la sangre; otros son generados por la voluptuosidad sexual – voluntad de la carne y, aun otros, son generados por la voluntad de los padres – voluntad del hombre. Juan 1:13

En esos tres casos no hay ninguna interferencia de Dios, mucho menos vinieron por Su voluntad.
Se puede hasta creer que Él lo permite.
Pero decir “fue Dios quien me dio a este bebé” o que fue de la voluntad de Él, como mínimo muestra falta de discernimiento espiritual bíblico.

Independientemente de la religión, si usamos un poquito la inteligencia, llegaremos a la siguiente conclusión:
¿Qué Dios es Ese que aprobaría la generación de niños en rebeldía?
Si Él es Dios Justo, ¿cómo autorizar el nacimiento de un ser fruto de una injusticia, como la traición?
¿Cómo autorizar el nacimiento de un niño fruto de un estupro?
¿Cómo autorizar el nacimiento fruto de la promiscuidad?
Y, si Él no tiene nada que ver con el nacimiento de unos, ¿lo va a tener con el de los demás?

Se concluye entonces que, desde el punto de vista racional, nadie viene al mundo por interferencia Divina, o por Su voluntad.
A no ser que Dios fuese un monstruo.

La cultura de que todos son hijos de Dios agrede frontalmente a Su Palabra. Es anti-bíblico. Es satánico.
La Biblia enseña que Jesús vino para los hijos de Israel en cumplimiento a las profecías.
Pero ellos Lo rechazaron.
Pero, a todos lo que Lo recibieron, les dio el PODER de ser hechos hijos de Dios, a saber, a los que creen en Su Nombre; los cuales no nacerán de sangre, ni de la voluntad de carne, ni de la voluntad del hombre, SINO DE DIOS Juan 1:11-13

En otras palabras: los hijos de Dios son apenas los nacidos de Dios. Sin ninguna interferencia humana.
De la misma forma como el Espíritu de Dios generó a Jesús, Él continúa generando a Sus hijos.