thumb do blog Blog Obispo Macedo
thumb do blog Blog Obispo Macedo

¡Heme aquí!

Buenos días, queridas Sras.

Primeramente, quiero agradecer la gentileza, cariño, atención y delicadeza con que me recibieron.

Confieso que estaba en la expectativa de saber qué me esperaba. Siempre las admiré mucho por lo que son, pero nunca había convivido con ustedes. Sin embargo, hoy puedo ver cómo son de parecidas… Por sí mismas exhalan la esencia del Señor Jesús.

Yo quiero muchoooo a la señora Viviane, la quiero realmente. Sería capaz de dar mi vida por ella, pues fue a través de ella y del trabajo del Godllywood que hoy tengo, vivo y disfruto de ese Dios tan sublime, que me transformó en quien soy.

Ellos (el obispo Julio Freitas y la señora Viviane), creyeron en mí cuando yo ya no creía más, me recibieron cuando los hombres me abandonaron; y me amaron cuando había sido rechazada. Mi gratitud siempre será eterna por todo lo que hicieron y por quiénes son. Salvaron mi alma, rescataron mi vida del infierno, me amaron sin interés. ¿Qué tenía yo para ofrecerles sino traumas, complejos, inferioridad, miedo, un montón de porquería que traía en mi interior? Pero, aun así, me vieron como una oportunidad y cuidaron de mí como alma.

No hay manera de no estarles agradecida. No podría ser indiferente a ese amor que solo tiene quien conoce y se sacrifica todos los días al Señor Jesús.

Yo ya imaginaba (porque no los conocía personalmente) que esa postura y ese carácter venían de la base familiar, pero ahora mis ojos lo ven claramente. Esa es la base de la Iglesia del Señor Jesús, de la Iglesia Universal del Reino de Dios.

Sé que soy demasiado pequeña, pero cuando David derrotó a Goliat también lo era.

Quiero poder servirlos todavía mejor de lo que un día ofrecí a cualquier otra persona. Es lo mínimo que puedo ofrendar ante todo lo que he recibido. Es lo que está en mi interior, es lo que más deseo en este momento. Y sé quien va conmigo, por eso sé que puedo hacerlo.
Estoy plenamente a disposición.

Quiero aprender, quiero practicar, quiero ser útil, quiero servir a Dios ante ustedes, en Espíritu y en Verdad.

“¡Heme aquí!… Habla porque Tu sierva oye.” 1 Samuel 3:10

¡Un fuerte abrazo!

Heidi Morais