La manifestación de la fe revela el tipo de cristianismo del fiel.

El espíritu corajudo para asumir determinada actitud de fe es el mismo que se apodera del objetivo.

El tamaño de la fe es medido por el esfuerzo de la actitud, o sea, la fe es medida por el sacrificio. Si hay sacrificio, entonces hay fe. Eso agrada a Dios.

Todos pueden participar de la fe sacrificio, pobres y ricos, porque el sacrificio está de acuerdo con los limites de cada uno.

Cuanto mayor es el sueño, mayor el esfuerzo a ser empleado. Es la ley de la vida en este mundo.

Cuanto mayor la conquista, mayor tendrá que ser el sacrificio. Si eso es real con respecto a la conquista de los bienes materiales y temporales, imagine en relación a las cosas eternas.

Por eso, nuestro Señor dijo: …el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan. Mateo 11:12

¿Que grado de esfuerzo es necesario hacer para apoderarse de la vida eterna? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Mateo 16:26