Más de 400 jóvenes de la Fuerza Joven Brasil, de San Pablo, viajaron 430 kilómetros en caravana para visitar Río de Janeiro. La primera parada fue en la glorieta de una plaza en el barrio de Meier (zona norte), donde hace mas de 30 años el obispo Macedo predicaba el Evangelio, comenzando la Iglesia Universal del Reino de Dios. El senador Marcelo Crivella participó del encuentro y fue homenajeado con la placa “Amigo de la Fuerza Joven”.

Acompañados por el pastor Jean Madeira, responsable por la Fuerza Joven Brasil, los jóvenes visitaran también la Catedral Mundial, en el barrio de Del Castilho (zona norte), donde participaron de una representación de la crucifixión de Cristo. Después de la presentación, una gran cantidad de jóvenes decidió bautizarse en las aguas.