¿Cabeza, Cola o Perdición Eterna?
El SEÑOR Dios prometió hacer que Su pueblo sea cabeza y no cola.
No significa que todos serían cabeza.
Cabeza serían los que creyesen.
Creerían los revelados.
Revelados serían los pequeñitos.
Pequeñitos serían los obedientes a Su Palabra.
No es por fuerza ni por violencia que las Promesas son cumplidas. Sino por el Espíritu de Dios que sirve a los que Lo sirven con la obediencia.
Solamente los siervos obedientes son colocados sobre lo mucho.
“Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.” Mateo 25:21
La condición para ser cabeza es servir al SEÑOR y obedecer Su dirección de forma incondicional.
“Te pondrá el SEÑOR por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos del SEÑOR tu Dios, que Yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas.” Deuteronomio 28:13
¿Puede ser honrado el siervo desobediente?
Si el desobediente es deshonrado, ¡imagínese el rebelde!
La parábola de los talentos muestra el destino del mal siervo. Mateo 25:14
¿Es justo que el Señor le confíe Sus promesas al siervo infiel?
¿Es posible que el siervo fiel y obediente sea deshonrado por el Señor de la Justicia?
Portugués
Inglés
Francés
Italiano
Haití
Ruso