¿Cuál es su elección?

El criterio usado por el SEÑOR para salvar a los hebreos del ángel de la muerte en Egipto fue la obediencia incondicional.

Ellos tenían que sacrificar un cordero, esparcir la sangre en los postes y en el dintel de la puerta, asar la carne en el fuego, comerlo con panes sin levadura y hierbas amargas.

Y lo comeréis así: ceñidos vuestros lomos, vuestro calzado en vuestros pies, y vuestro bordón en vuestra mano; y lo comeréis apresuradamente; es la Pascua del SEÑOR. Éxodo 12:11

La vida de cada familia dependía de su obediencia a este mandamiento.
Nada más.

Obediencia: vida;
Desobediencia: muerte.

El mismo criterio se aplica al recibimiento del Espíritu Santo.

Quien quiera recibirlo, primero tiene que renunciar a las actitudes pecaminosas.

A partir de este esfuerzo de fe, recibe la visita del Señor Jesús, que lo bautiza con el Espíritu Santo.

Sabréis que Yo Soy el SEÑOR, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas, pueblo Mío. Y pondré Mi Espíritu en vosotros, y viviréis… Ezequiel 37:13

Jesús ya abrió las sepulturas.

Los enterrados en los pecados tienen que dejarlos ¡y huir rápidamente!

En la huida, encontrarán al Señor Jesús.

Haga su parte y después el SEÑOR hará la de Él.

La obediencia a la Palabra de Dios significa el libramiento del ángel de la muerte y el recibimiento del Ángel de la Vida;

¿Cuál es su elección?